En 2003, el filósofo británico Nick Bostrom proponía que nuestro universo podía ser una simulación informática llevada a cabo por nuestros descendientes. Una hipótesis descabellada que, sin embargo, quizá algún día llegue a probarse –o a refutarse- utilizando ordenadores superpotentes. Brostom sostenía que “la creencia de que hay una posibilidad significativa de que algún día lleguemos a ser posthumanos que realicen simulaciones de sus ancestros es falsa, a no ser que actualmente estemos viviendo en una simulación”.
Según un equipo de físicos de la Universidad de Washington, entre los que se encuentra Martin Savage, una simulación informática podría aclarar si el cosmos es una realidad artificial.
La prueba ideada por los físicos está basada en supercomputadoras. Las actualmente existentes utilizan una técnica llamada "retícula de cromodinámica cuántica", capaz de simular diminutas partes del universo, del tamaño aproximado de un núcleo atómico.
Según un equipo de físicos de la Universidad de Washington, entre los que se encuentra Martin Savage, una simulación informática podría aclarar si el cosmos es una realidad artificial.
La prueba ideada por los físicos está basada en supercomputadoras. Las actualmente existentes utilizan una técnica llamada "retícula de cromodinámica cuántica", capaz de simular diminutas partes del universo, del tamaño aproximado de un núcleo atómico.
Los científicos esperan que, con el paso del tiempo y a medida que aumente la potencia de los ordenadores, se puedan realizar simulaciones más potentes y a mayores escalas. ¿Podría comprobarse entonces la veracidad o la falsedad de la teoría de Bostrom?
Según Martin Savage; “Si el universo fuera realmente una simulación llevada a cabo con recursos finitos, eso dejaría una huella en el comportamiento de los rayos cósmicos de muy alta energía. Las desviaciones anticipadas por la relatividad podrían ser más apreciables a ese nivel energético. El hecho de no encontrar variaciones de este tipo sugeriría que no nos encontramos en una simulación o que, para detectarla, sería necesaria una mayor precisión en nuestras mediciones, por el tamaño minúsculo del entramado espacial”. “Hasta el momento no ha aparecido ninguna evidencia que indique que estamos en una simulación”, aclara.
Según Martin Savage; “Si el universo fuera realmente una simulación llevada a cabo con recursos finitos, eso dejaría una huella en el comportamiento de los rayos cósmicos de muy alta energía. Las desviaciones anticipadas por la relatividad podrían ser más apreciables a ese nivel energético. El hecho de no encontrar variaciones de este tipo sugeriría que no nos encontramos en una simulación o que, para detectarla, sería necesaria una mayor precisión en nuestras mediciones, por el tamaño minúsculo del entramado espacial”. “Hasta el momento no ha aparecido ninguna evidencia que indique que estamos en una simulación”, aclara.
"Si consigues hacer una simulación lo suficientemente grande -explica Savage- de ella emergería algo muy parecido a nuestro Universo". Por lo cual, según el científico, solo es cuestión de buscar en el Universo en que vivimos una "firma" análoga a la que nosotros mismos estamos utilizando en nuestras simulaciones a pequeña escala.
Si el concepto resultara ser cierto, abriría posibilidades ilimitadas. Por ejemplo, los investigadores sugieren que si nuestro Universo fuera una simulación, entonces podría haber otras simulaciones ejecutándose al mismo tiempo, que serían Universos paralelos al nuestro (dando forma a la idea de multiverso).
En cuyo caso, cabría hacerse la siguiente pregunta: ¿Podríamos comunicarnos con otros Universos si todos ellos se están ejecutando sobre la misma plataforma?
“Uno se puede imaginar activando simulaciones de múltiples universos distintos desde el mismo ordenador, si este fuera lo suficientemente potente. Yo concibo el escenario de la simulación en el contexto de científicos que, en el futuro, estén explorando de dónde venimos, a través de simulaciones de nuestro universo”, dice Savage.
Desde el punto de vista de la programación de software, el universo podría haber sido creado hace cinco minutos con la exacta configuración que tenía en ese momento (incluyendo todas nuestras memorias, y el estado de toda la materia y energía del universo), y nosotros no podríamos saberlo.
Pero tampoco hay que desesperarse por la naturaleza de nuestra realidad... Después de todo, ¿Qué diferencia habría entre el universo real y otro universo copia del primero? ¿Qué diferencia habría entre materia e información? ¿No sería lo mismo tener una unidad mínima de materia en cierta posición, que tener "algo" que se comportase como si fuera una unidad mínima de materia, en la misma posición? Ciertamente, es difícil de ver la diferencia...
Fuentes: