Qué pasa si usas el 100% de tu cerebro

Qué pasa si usas el 100% de tu cerebro

Popular
 
0.0 (0)
Escribir Opinión
¿Qué pasaría si utilizásemos el 100% de nuestro cerebro?
Este el planteamiento de la película Lucy, en la que una joven es obligada a hacer de mula y la sustancia que transporta acaba siendo asimilada por su organismo con inesperadas consecuencias.
A medida que se van activando más capacidades de su cerebro, va adquiriendo habilidades cada vez más asombrosas. Primero es algo sutil: adquiere la capacidad  de pensar más rápido y de forma más ocurrente, pero pronto adquiere superpoderes, para finalmente, integrarse con la tecnología, tener la capacidad de viajar en el tiempo y hasta fusionarse con el propio universo.
¿Qué pensasteis al ver esta película? ¿Tiene un mínimo de base? Ciertas mejoras si se aumentan capacidades mentales, podrían llegar a entenderse… ¿o no?
La verdad es que nada en lo visto en la película es posible.


Existe una creencia popular muy extendida, que afirma que los seres humanos utilizamos solamente el 10 por ciento de nuestro cerebro. Por asociación, se sugiere que mediante algunos procesos, una persona podría ser capaz de aprovechar ese potencial no utilizado y que, al hacerlo, se produciría un aumento significativo de su inteligencia y capacidades.
Lo cierto es que según los neurólogos, el ser humano utiliza prácticamente el 100% del cerebro para realizar cualquier actividad.
Si el 90 % del cerebro no se utiliza, entonces cuando se lesionan ciertas áreas no debería afectar al rendimiento. Pero no hay ningún área del cerebro que pueda ser dañada sin que se pierda alguna habilidad. Incluso los daños en las áreas más pequeñas, pueden conllevar consecuencias graves.
Pero más reveladoras son las Tecnologías como la tomografía por emisión de positrones y la imagen por resonancia magnética funcional. Éstas permiten monitorizar la actividad cerebral de personas vivas. Estas técnicas han revelado que, incluso mientras dormimos, todas las partes del cerebro están activas.
A parte de eso, varias décadas de investigación han permitido mapear las funciones de las áreas del cerebro, y no se han encontrado áreas que no tengan ninguna función.
Análisis microestructurales y estudios metabólicos, entre otras investigaciones, nos llevan también a que es imposible que solamente funcione un 10%  de nuestro cerebro.

Sin embargo, hay buenas razones para que esta creencia haya calado tan hondo en nuestra sociedad.
El desacierto parte de una cita erróneamente atribuida al propio Albert Einstein, lo que ha hecho de esta falacia sin ningún tipo de base científica una afirmación que perdura en nuestros días y tiene gran aceptación.
La frase más parecida a este bulo sin fundamento, en realidad fue pronunciada por el psicólogo estadounidense William James, quien en 1906, en un artículo titulado “Las energías del hombre”, escribió: "Estamos haciendo uso de tan solo una pequeña parte de nuestros posibles recursos físicos y mentales."

También hay quien sostiene que el alimento de este mito está en las investigaciones de finales del siglo XIX, donde neurólogos descubrieron que las neuronas tan solo componen un 10% del porcentaje de nuestro cerebro. Pero pensar que eso supone que sólo usamos el 10% de la capacidad cerebral es absurdo (según han dicho los expertos una y otra vez a lo largo de las últimas décadas).

Pero hay una cuestión todavía más interesante en todo esto: Se ha demostrado que las personas más inteligentes, tienen una actividad cerebral por debajo de la media. Esto sugiere que sus circuitos cerebrales son más eficientes y por tanto, necesitan poner en juego menos "recursos" que el resto. Así que de usar ese 90% que según este falso mito dejamos de utilizar, eso no nos proporcionaría nuevas capacidades, sino más bien, sería muestra de que somos menos inteligentes (y que necesitamos más recursos para hacer las mismas cosas).
Bien. Y entonces... ¿por qué la gente sigue creyendo en esta mentira, o más bien, por qué necesita creerla?

La idea que alimenta el engaño es muy seductora; unas supuestas sobrehumanas capacidades, creencias astrológicas combinadas con tintes sobrenaturales y hasta ciertos misticismos tan de moda en nuestros tiempos, proliferan contra todo pronóstico en unos tiempos en que la ciencia parece dar explicación paulatina a cualquier misterio antaño considerado indescifrable.
El auge de la astrología, lo sobrenatural y las creencias religiosas, no parecen tambalearse ante las evidencias científicas. Más bien al contrario, se van incrementando en una sociedad  insatisfecha que demanda falsas esperanzas y que reniega de lo razonable.

Alimentadas por creencias espirituales y religiosas de promesas de una vida después de la muerte, muchas personas consideran su vida actual un mero trámite (una especie purgatorio); una forma de prepararse para la verdadera existencia, la que de verdad importa: la vida que les espera una vez hayan muerto.
A mi sinceramente, que cada vez más personas se desentiendan de esta vida y solo les importe lo que supuestamente van a encontrar cuando se mueran, no me parece nada alentador.

El experto británico Robert Rowthorn, investigador de la Universidad de Cambridge, publicó un estudio en el que asegura que las personas que nazcan predispuestas a creer en Dios serán más numerosas en el futuro.
Para llegar a dicha conclusión, se basó en estudios que demuestran que las personas religiosas tienen más hijos (y por tanto serán más), que las que rechazan la existencia de algo superior.
Como la predisposición de un individuo a la religión está en gran parte condicionada por la genética, si ambos padres tienen esa característica en su ADN es más probable que sus hijos la manifiesten.
Esto no quiere decir que absolutamente todos los niños que nazcan con dicha predisposición se convertirán en personas religiosas, sólo significa que en el futuro, más personas estarán predispuestas a la religiosidad.

Esto quizá explica el incomprensible auge actual de la astrología y demás materias sobrenaturales. Porque sí, hay sospechosas coincidencias de concepto entre religiosos y amantes de lo sobrenatural. 
Hoy no voy a entrar a analizar estas prácticas (de si son honestas o no lo son, ni de si tienen base o no la tienen), pero sí quiero incidir en que todo apunta a que la tendencia a creer en lo espiritual, lo místico, lo religioso y demás… parece que irá en aumento.

Fuentes:

Opiniones de los usuarios

Asignar una puntuación (mientras más alta mejor es)
5
Comentarios

MENTIRA EL COMENTARIO

ESTO ES ERRONEO
Fruto de un periodico amarillista.
Control mental silva, demostro feacientemente que no usamos todo el potencial y formo una camada de buenos estudiantes, profesionales,etc
Silva no por mexicano era tonto, con varios titulos organizo el metodo y fue usado con exito por nosotros, yo soy una graduada.
Y es cierto, parecemos de otro planeta, cuando nos ponemos una meta no paramos hasta lograrla.
somos mas rapidos mentalmente, mas intuitivos y creativos.
A quien se le ocurre sin ver criticar algo???
Animales, torpes!!!

Fue útil la opinión?